El hospital de Valdemoro, uno de los ocho proyectados por el Gobierno regional en esta legislatura,abrirá sus puertas el lunes próximo día 26 de noviembre, atenderá aproximadamente a 150.000 personas y se calcula que inicialmente tendrá en torno a 100 camas.
Como característica diferenciadora es que será concertado, al contrario que los otros siete nuevos hospitales de la Comunidad, que se regirán por un sistema de concesión y cuyos servicios sanitarios tendrán gestión pública, mientras que los no sanitarios (limpieza, cocina...) serán externos.Esto no impedirá que la atención sanitaria que se preste sea bajo el principio de gratuidad, siendo la cartera de servicios la misma prevista para los otros nuevos hospitales.
El resto de hospitales comenzarán a abrirse "gradualmente en los primeros meses de 2008", avanzó Güemes.
Fuente: Madridiario
Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, alardea de ser liberal. Es el sello de su gestión y conlleva promover la gestión privada para los servicios de titularidad pública.
ResponderEliminarEn su último mandato se hizo patente con los ocho nuevos hospitales. Para no asumir la inversión de construirlos (y aumentar la deuda regional) dejó las obras en manos de empresas privadas a cambio de un alquiler durante 30 años. Un ejemplo es el hospital de Valdemoro, con el que el Ejecutivo regional tiene un concierto por el que sólo en 2007 ha tenido que pagar 13,24 millones.
Por si no había quedado claro, Aguirre anunció en el debate de investidura del pasado 19 de junio su intención de mantener esta tendencia en su siguiente mandato: "El Gobierno regional seguirá colaborando con empresas privadas para ofrecer servicios de cada vez más calidad".
Ante las protestas de la oposición, PSOE e IU, la presidenta mostró su extrañeza de que, en pleno siglo XXI, se oponga lo público a lo privado. "Mientras la sanidad y la educación sean universales, gratuitas y de calidad, a los ciudadanos les preocupa poco la gestión", defendió Aguirre.
En realidad, la privatización de los servicios es consecuencia de la fuerte deuda que arrastra el Gobierno regional, que, pese a contar con un presupuesto de 18.160 millones de euros, no puede hacer frente a nuevos gastos. En el segundo trimestre de 2007, Madrid tenía, según el Banco de España, una deuda de 10.227 millones de euros, 1.168 millones más que cuando Aguirre asumió el poder en mayo de 2003.
Por eso, las empresas privadas han sufragado en la anterior legislatura la construcción de nuevas líneas de metro, carreteras, hospitales y hasta viviendas. Para el alquiler de estos servicios, sólo en los presupuestos regionales de 2007 (los del próximo año se presentarán a finales de mes) estaba contemplado el pago de 776 millones de euros en concepto de cánones. Ahora se sumarán a ellos los Teatros del Canal.